Cada año abandonan sus estudios de secundaria 630 mil jóvenes, asegura en entrevista el director del INEA
Imposible erradicar el rezago educativo sin resolver el fondo: Castro Muñoz
33 millones de personas, mayores de 15 años, no saben leer ni escribir o no terminaron la escuela
De las 242 dependencias gubernamentales sólo en 22 su personal tiene al menos secundaria
Chiapas, Michoacán, Oaxaca y Guanajuato, las entidades con los problemas más serios.
José Antonio Román
Periódico La Jornada
Martes 18 de enero de 2011, p. 40
Mientras no se resuelva de fondo el enorme problema que representa todavía la falta de ingreso y el alto índice de deserción en educación básica –donde 630 mil jóvenes abandonan cada año sus estudios de nivel secundaria–, será imposible erradicar el rezago educativo, estimado en 33 millones de personas, aseguró el director general del Instituto Nacional de Educación para los Adultos (INEA), Juan de Dios Castro Muñoz.
Así, los esfuerzos del instituto, que este 2010 concluirá con casi 690 mil personas mayores de 15 años alfabetizadas o con estudios de primaria o secundaria terminados, resultan notoriamente insuficientes. “Es como sacar agua de un barco, mientras más allá hay un agujero por donde entra más agua.”
Juan de Dios Castro advirtió que al rezago educativo –personas mayores de 15 años que no saben leer ni escribir, o que no concluyeron primaria o secundaria–, que fue acumulándose durante varias décadas del siglo pasado, cuando no había escuelas de nivel básico en todo el país, se le está sumando ahora un “nuevo rezago más fresco”, con personas cada vez más jóvenes que el sistema educativo se ha visto incapaz de retener.
En amplia entrevista, el director del INEA informó que México está muy cerca de cumplir los objetivos del milenio en materia de alfabetización; que 18 por ciento de todos los certificados de secundaria que se expiden en el país, y 8 por ciento de los de primaria, los emite el instituto; que el costo de un alumno graduado es de 5 mil 400 pesos; que los recursos económicos son elementos indispensables, pero insuficientes para terminar con el rezago educativo.
También reconoce abiertamente que el INEA solo no puede con esta tarea, pues debe coordinar esfuerzos con otras dependencias y niveles de gobierno; que desde el año 2000 no se ha autorizado al instituto una sola plaza más de las 7 mil 500 para técnicos docentes y 3 mil administrativos, con 110 mil voluntarios que reciben una gratificación por enseñar, que no todos los estados asumen un compromiso real con la tarea educativa.
Distrito Federal, Coahuila, Nuevo León y Tabasco son las entidades con menor rezago educativo, mientras Chiapas, Michoacán, Oaxaca y Guanajuato presentan serios problemas, de acuerdo con las cifras más recientes del INEA. No obstante, Chiapas aporta 45 millones de pesos más de su presupuesto a esta tarea, “pero la tarea pendiente es mucho más difícil”, reconoce.
En este 2010, el INEA ejerció mil 870 millones de pesos, mientras para el próximo año el Congreso le autorizó 2 mil 100 millones de pesos. Actualmente atiende a 2.4 millones de personas mayores de 15 años, de los cuales 690 mil concluirán su alfabetización o su primaria o secundaria. El año pasado lo hicieron 635 mil, y para 2011 se espera que la meta rebase 700 mil graduados.
Durante la entrevista, realizada en sus oficinas de la colonia Condesa, el director Juan de Dios Castro detalla la actual conformación del rezago educativo: 5.8 millones de personas mayores de 15 años son analfabetos; 10 millones no tienen primaria y 17 millones están sin secundaria. En total: 33 millones de mexicanos en rezago educativo.
Sin embargo, el instituto está a la espera de los resultados que arroje el censo 2010 en materia de escolaridad, en el que no se descarta alguna sorpresa, después de que el registro nacional reveló que somos 112 millones de mexicanos, varios millones más de los que se estimaban originalmente.
La UNESCO señala que México es de los pocos países, junto con Aruba y Venezuela, que están en la ruta de cumplir el compromiso del Milenio de reducir para el año 2015 a la mitad el índice de analfabetismo que se tenía en el 2000, explicó el titular del INEA en su pasado informe. Hace una década la cifra era 10 por ciento y actualmente es de siete puntos.
A 29 años de haber sido creado el instituto, Castro califica la tarea desempeñada por el INEA de “extraordinaria”, y lo pone como ejemplo para la comunidad internacional en el ramo. No obstante, señala que son difíciles las comparaciones, pues México tiene características que otras naciones no tienen, como el tamaño del sistema educativo, donde los 33 millones de mexicanos en rezago educativo es una población similar a la de Canadá, y que también interviene la gran diversidad lingüística, con más de 364 variantes en todo el territorio mexicanos. “Éstos, sin duda, son factores que matizan el abatimiento del rezago educativo”, dijo.
Juan de Dios Castro informó que en este año por primera vez se levantó un registro de la escolaridad de las dependencias federales con la finalidad de identificar a las personas en rezago educativo. De las 242 dependencias sólo 22 están libres, es decir, que todo su personal tiene cuando menos la secundaria. De las otras 220 se tiene un registro de 156 personas analfabetas –muchas de ellas próximas a jubilarse– y otras 30 mil en rezago. La meta es atenderlas a todas, explicó, y agregó que ahora se busca que este programa baje a nivel estatal y municipal, donde hay alcaldes que no saben leer ni escribir. Hay casos en el estado de Oaxaca.
Asimismo, adelantó algunos planes para el 2011. También por primera vez, en las preinscripciones a educación básica de febrero próximo se levantará una encuesta de escolaridad de los padres de familia con la intención de iniciar un programa especial. En este caso, se buscará incluso que los planteles abran sus puertas en horario sabatino para que los jefes de familia reciban instrucción escolarizada.
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